LIMPIEZA DE GRAFFITIS

Cuando las pintadas sobre las paredes no son deseadas pueden convertirse en una problema que se debe erradicar.

Las pintadas sobre paredes de edificios, trenes y ómnibus son difíciles de eliminar y –en ocasiones- le dan a los objetos intervenidos aspecto descuido y abandono, por lo que, en especial en los entornos urbanos, representan problemas para la autoridades y vecinos, ante el que deben actuar auxiliados por una empresa de limpieza.
Cuando un graffiti aparece en la fachada de un inmueble, se debe actuar con cierta celeridad, ya que, cuanto más tiempo pase, más penetrará la pintura en el material y resultará más difícil su eliminación.
Más allá de que se trate de una intervención artística, un desarrollo publicitario, una protesta política o una manifestación de alguna tribu urbana, si lleva mucho tiempo sobre la pared o se intentase quitar con métodos caseros, puede quedar una marca.
Se debe tener en cuenta el material de la base que fue pintada, debido a que en la mayoría de las fachadas de ladrillo, cemento u hormigón, por ser porosas, absorben la pintura de los graffitis y eso hace que sea muy importante acudir a una empresa profesional que utilice herramientas especiales que garanticen el mejor de los resultados.
Se deberá hacer un análisis previo de la situación, porque no existe una solución o técnica única para eliminar las pinturas y, además, los colores más resistentes y difíciles de eliminar son el rojo y el azul.
Las soluciones comerciales no sirven para eliminar graffitis que ocupan una gran superficie, sobre todo si el material es poroso o tiene una superficie irregular. Además, los productos para remover las pintadas sólo pueden ser usados profesionales, ya que se trata de disolventes químicos que no están a la venta para el público.
Es importante que los productos específicos actúen por si solos, el tiempo que marcó el fabricante, lo que dependerá de factores como por ejemplo la temperatura ambiente. En ocasiones, las empresas especializadas utilizan aparatos de agua a presión cuando ese producto en cuestión ya ha actuado.
Otro método es utilizar una mezcla de agua con arena sobre fachadas de piedra, un trabajo laborioso y delicado que ha de quedar siempre en manos de especialistas, no sólo para garantizar un buen resultado, sino porque a veces se usan herramientas que, en manos de personas sin conocimientos, pueden causar un accidente.

ep