LIMPIEZA TERCERIZADA

Al contratar una empresa que realice las tareas de limpieza será necesario tener en cuenta algunos datos que servirán para tener un contrato claro.

La limpieza profesional requiere, como otras actividades, que las empresas que la encaren cumplan con una serie de condiciones que permitirán que la relación comercial entre ambas partes se conduzca por mejores caminos.
Lo primero que deberá tener en cuenta el contratante será que la empresa cumpla con las normas legales en vigencia. Al respecto, la compañía de limpieza debería contar con seguros de responsabilidad civil que cubra los posibles daños que causen sus empleados durante su trabajo, como roturas, arañazos, incendios, golpes, deterioro por el mal uso de químicos y equipos.
En esa línea, se debería constatar no sólo la idoneidad del personal que realice las tareas, sino también que sus contratos estén en regla y que cuenten con las coberturas de administradoras de riesgos de trabajo, ya que ante un accidente que pudieran padecer los trabajadores sin ese requisito, el contratante sería solidariamente responsable.
Para conocer el desempeño de la empresa de limpieza con la que se tercerizarán los trabajos, los especialistas recomiendan buscar las opiniones de otros clientes. Con el apoyo de internet, esta tarea se podría simplificar con la consulta a la página web de la compañía y la búsqueda de comentarios en las redes sociales.
Como en toda relación comercial, se podría esperar alcanzar una relación de largo plazo, dado que si el trabajo se realiza de la manera esperada, se superarán los tiempos de acostumbramiento de un lado y otro –con todas las fallas que pueden ocurrir en esos períodos-, además del conocimiento que tendrán de instalaciones, necesidades y rutinas.
Además, será posible alcanzar beneficios en los costos, con acuerdos de larga data, y los trabajadores que realicen las tareas no estarán pendientes de posibles desvinculaciones que afecten su desempeño, en desmedro del contratante.

ep